Entrevista con Dilgo Khyentse Rimpoché
Y habíamos estado en la habitación privada que tiene en el monasterio Sechen en Nepal. La energía era tan clara y pura que flotábamos en ella en un espacio claro y abierto.
Luego había visto algún video con las enseñanzas del "jovencito" Dilgo Khyentse, nada especial. El otro día salíamos de las enseñanzas de Mingyur Rimpoché en Tergar cuando él entraba a visitar a SS Karmapa. Tampoco nada especial. Hasta que fuimos a verlo.
Sólo su presencia nos hizo flotar de nuevo. ¿De qué país sois? - Y allí cada uno del suyo. ¿Quién es vuestro maestro? Y también hubo un hijo para cada padre. Luego le dije:
-Pero aquí en Bodhgaya nos reunimos todos entorno a SS Karmapa cada año.
-¿Orgyen Trinley Dorje?
- Sí, claro.
Y entonces se emocionó, y dijo:
-Ah! No sabéis la grandísima suerte que tenéis de tener un tan gran maestro como él y poder estar cerca de él.
Y se podía palpar en el aire que decía lo que sentía su corazón.
Así nos pusimos todos contentos contentos. Como se puede ver en todas las "burbujas" de felicidad que nos rodean:
Esa misma noche, hablando con unas amigas que fueron a verlo vieron como una señal en la parte superior de la mano -no un tatuaje ni pintado- con la forma de un dorje. A mi me lo enseñaron en sus fotos, y os aseguro que en la foto está claro. Un dorje de unos cuatro centímetros.
Luego había visto algún video con las enseñanzas del "jovencito" Dilgo Khyentse, nada especial. El otro día salíamos de las enseñanzas de Mingyur Rimpoché en Tergar cuando él entraba a visitar a SS Karmapa. Tampoco nada especial. Hasta que fuimos a verlo.
Sólo su presencia nos hizo flotar de nuevo. ¿De qué país sois? - Y allí cada uno del suyo. ¿Quién es vuestro maestro? Y también hubo un hijo para cada padre. Luego le dije:
-Pero aquí en Bodhgaya nos reunimos todos entorno a SS Karmapa cada año.
-¿Orgyen Trinley Dorje?
- Sí, claro.
Y entonces se emocionó, y dijo:
-Ah! No sabéis la grandísima suerte que tenéis de tener un tan gran maestro como él y poder estar cerca de él.
Y se podía palpar en el aire que decía lo que sentía su corazón.
Así nos pusimos todos contentos contentos. Como se puede ver en todas las "burbujas" de felicidad que nos rodean:
Esa misma noche, hablando con unas amigas que fueron a verlo vieron como una señal en la parte superior de la mano -no un tatuaje ni pintado- con la forma de un dorje. A mi me lo enseñaron en sus fotos, y os aseguro que en la foto está claro. Un dorje de unos cuatro centímetros.
Comentarios
Celia, ¿ ha pasado algo con SS. Karmapa y los chinos?. Me ha llegado una petición de recitar 21 Taras para quitar obstáculos. Si puedes dame noticias y las difundo. Besos